Conversión Pastoral en la escuela

Desde mi misión en Escuelas Católicas de España, y en unión al Departamento de Innovación Pedagógica, estamos llevando a cabo una bella reflexión sobre la manera de responder a esa llamada que nos hace el papa Francisco en el número 25 de la exhortación Evangelii Gaudium

El planteamiento pastoral en la escuela católica está sufriendo una importante y bella metamorfosis “desde dentro” de lo que quiere ser un proyecto educativo cristiano integral e integrador. Décadas de compromiso y reflexión pedagógica-pastoral han permitido formar el capullo donde se está gestando, y en muchos casos realizando, el Pensamiento de Innovación Educativa de Escuelas Católicas, que por estar fundado e inspirado en el ideario cristiano de nuestras Instituciones, es evangélico y evangelizador. La estructura de este modelo, que está inspirando y orientando la transformación pedagógica en nuestros centros, nos ofrece una manera de exponer, sumariamente, qué entendemos por “escuela evangelizadora”.

Escuela evangelizadora es aquella cuyo proyecto educativo surge del Evangelio, y tiende a su realización en la vida del centro y en cada uno de sus proyectos y actividades. Se encuadra dentro de la misión de la Iglesia, en la “nueva etapa evangelizadora marcada por la alegría”:

“La alegría del Evangelio llena el corazón y la vida entera de los que se encuentran con Jesús. Quienes se dejan salvar por Él son liberados de la tristeza, del vacío interior, del aislamiento. Con Jesucristo siempre nace y renace la alegría.” Papa Francisco, Evangelii Gaudium, 1.

Misión que brota del convencimiento que el encuentro con Jesús da plenitud y sentido a la existencia, y compromete en la transformación de la sociedad según el proyecto salvador de Dios. Por lo tanto, toda la gestión del centro (procesos y actividades, recursos, contenidos, tiempos, espacios...) tiene como objetivo el anuncio de la alegría y la plenitud que brota del encuentro con Cristo, quien es capaz de transformar la vida de quien libremente lo recibe con fe, ayudarle a crecer de forma integral, y ofrecerle los elementos para articular el propio proyecto desde el Evangelio, en Iglesia, para la transformación del Mundo.

Afirmamos con demasiada rapidez que el Evangelio es la razón de ser de la Escuela Católica; o dicho con terminología de modelos de gestión de calidad: el “valor añadido” de nuestra oferta educativa. Sin duda es lo que nos debería caracterizar, y si luchamos por la libertad de enseñanza en estos tiempos recios en los que vivimos, es porque ofrecemos a la sociedad un proyecto educativo diferente. Aquello que nos caracteriza es nuestra identidad evangélica y evangelizadora, pero nuestras opciones formativas, organizativas, económicas… muchas veces se orientan a proyectos que buscan ser competitivos frente a los que ofrecen nuestros mismos servicios a la sociedad.

Sin duda, necesitamos un modelo que propicie una sostenibilidad de la misión evangelizadora en nuestros centros, desde donde se fijen horizontes a largo plazo que animen y orienten las acciones concretas y valientes, que lleven a la transformación personal y social desde los valores del Evangelio.

Aquí os ofrecemos los artículos que profundizan estas ideas publicados en la revista de Escuelas Católicas, desde el número 71 al 75, por Mercedes Méndez, ra.